Sergio Vegas abrió el festejo con una actuación desigual en la que destacó por su toreo en el galope de costado. Falló con el rejón de muerte y fue ovacionado al terminar su actuación. Se mostró más entonado en el cuarto, otro toro rajado en el que se esforzó para tratar de sacarlo de la querencia. De nuevo emborronó su hacer con el rejón de muerte y el premio quedó de nuevo en ovación.
Diego Ventura acertó a templar y a encelar la embestida a pesar de la mansedumbre de la corrida. Clavó rejones y banderillas haciendo bien la reunión. Al matar de un rejón cortó una oreja en el primero. Y con una ejecución de buen calado de toreo ecuestre, haciendo gala de buenos recursos técnicos, fue premiado con otro apéndice en el quinto haciéndolo todo él.
Leonardo Hernández volvió a lucir nuevamente en Las Ventas su estilo de toreo ecuestre de buena escuela, sin concesiones a la galería, y enceló a sus dos toros acertando a sacar de sus querencias a tablas los astados, y clavando al estribo que es lo correcto. El caballo Duque fue alcanzado por un arreón del tercero, sufriendo una cornada y esuchó el joven rejoneador fue ovacionado en este primero de su lote. Lo más destacado de la actuación del jinete cordobés llegó en el sexto, en el que dejó los quiebros de mejor ejecución de la tarde. Una labor que rubricó con certero rejón de muerte y que fue premiada con las dos orejas.
Los adictos al rejoneo disfrutaron de una tarde entretenida de toreo a caballo pese al mal estilo del ganado.