Con casi lleno en los tendidos, se ha celebrado esta tarde del 27 de enero en León una nueva corrida de su importante feria taurina, en la que Diego Silveti ha vuelto a dejar constancia de su impronta y del gran momento que atraviesa, cuajando una gran faena a su segundo toro del que sólo pudo pasear una oreja debido a que él toro tardó en rodar tras la estocada y hubo de usar el descabello. En esta corrida también triunfó Juan Pablo Sánchez, que cortó las dos orejas de su segundo toro, mientras que Sebastián Castella no tuvo ninguna suerte con ninguno de los tres que estoqueó, incluyendo el sobrero de regalo.

 

Se lidiaron toros de Teófilo Gómez, el primero para rejones, y el octavo de regalo. El resultado de los toreros fue el siguiente: el rejoneador Jorge Hernández Gárate, silencio; Sebastián Castella, ovación, silencio y silencio en el de regalo; Juan Pablo Sánchez, palmas y dos orejas; Diego Silveti, ovación y oreja.

 

Gran actuación la de Diego Silveti con su segundo toro, al que fue una lástima que tuviera que utilizar el descabello por tres veces, pues de haber rodado sin puntilla le hubiera cortado el rabo, después del alboroto que le formó con capote y con muleta en una faena redonda y de gran calidad. Con la tela rosa toreó de manera sensacional de salida y en un quite redondo y muy embraguetado con el capote a la espalda. Una vez cogió Diego la muleta, la faena estuvo presidida por el temple y la despaciosidad con la que manejó las telas. Bueno fue su toreo a derechas, pero mejor aún cuando lo pasó con la mano izquierda, en naturales largos y profundos en los que se encajó de riñones. El final con bernadinas fueron el colofón perfecto a una faena que se vivió entre gritos de torero, torero. Se tiró tras la espada, pero como ya queda dicho, hubo de usar el descabello y sólo le cortó una oreja.

 

Con su primero también estuvo muy entonado, aunque en esta ocasión, y debido a que el toro se pegó una fuerte costalada con el capote, el animal quedó mermado de facultades y llegó con menos motor a la muleta. Aún así, Silveti cuajó dos tandas muy buenas de naturales y remató su labor por manoletinas. Una casi entera y un descabello, dieron paso a un fuerte ovación.

 

También se mostró muy torero y rotundo Juan Pablo Sánchez, especialmente en su segundo toro al que cortó las dos orejas. Juan Pablo se pegó un arrimón, acortando las distancias y tirando muy bien del toro de Teófilo Gómez por los dos pitones. Faena de valor que le valió el doble trofeo y la puerta grande. Escuchó palmas en su primero al que también acortó el terreno después de torear con templanza.

 

Ninguna suerte tuvo en esta ocasión el francés Sebastián Castella pues aunque en su primera faena hubo buenos momentos, escuchando una ovación, los otros dos que lidió después no le dieron opciones: el quinto al partirse un pitón y el sobrero de regalo al no embestir, por lo que no hubo lugar al éxito.