Fuente: Los toros dan y quitan

DIEGO LUNA IZQUIERDO
Solo para efectos ilustrativos
“La Corrida”
Eduard Manet (1832-1883)

Picador que fue embestido por un  toro el 1 de julio de 1830 y que falleció días después a resultas de las lesiones. (Fuente: Accidentes Oculares en la Tauromaquia I de 1801 a 1941 de los Doctores Puertas y Celis)

El erudito taurino, don Juan José de Bonifaz Ybarra, refiere de este picador, que << Vio su primera luz en la ciudad de la Giralda (Sevilla) el 10 de abril de 1788, Diego Luna Izquierdo, y moriría en la Villa y Corte, como resultado de las graves lesiones que le produjo un toro de Gaviria, al desmontarle con violencia de su montadura, el 1 de julio de 1830. »

Don «José Alameda», el afamado abogado, escritor y cronista taurino español, radicado en México, y que llevó por nombre verdadero, el de Luis Carlos Fernández y López Valdemoro, por alguna razón hace fallecido al picador Diego Luna Izquierdo, el 1 de junio de 1830 en Madrid, por un toro de la dehesa de Zapata. (Fuente: Crónica de Sangre-400 Cornadas Mortales y algunas más/Editorial Grijalbo/ 1981/ Página 49)

El historiógrafo taurino Juan José Zaldivar Ortega, en su libro «Víctimas del Toreo»-Apartado de Picadores, página 63, refiere que: Diego Luna, picador de toros sevillano, nacido hacia el año 1787, falleció en Madrid, a consecuencia de un tremendo batacazo, cuando contaba 43 años de edad. El (01-07-1830) -en la imagen de abajo parece el año 1850 ¿?-, siete años después de haber tomado la alternativa en la Real Maestranza de Caballería de Sevilla, el (30-05-1823), se presentó en la Plaza de Toros de Madrid donde su nombre había llegado con rumores muy elogiosos, el citado día 1 de julio. En una vara, el quinto toro lo volteó con el caballo tan desgraciadamente que, retirado a la enfermería sin conocimiento, falleció a los pocos días, hacia el 7 del citado mes.


Diego Luna se quedó solo. El matador lejos del percance, el alguacil y presumiblemente su hijo, mirando, y desde el callejón hay quienes pretenden lanzarle objetos al toro…

Citan en el libro «Necrología Taurina», segunda edición, de Tomás Orts Ramos, «El Niño de Dios» (1866-1939) y publicado en 1889: Diego Luna.- La primera vez que pisó este picador la plaza de Madrid, el 1 de julio de 1830, el quinto toro, de la ganadería de Gaviria, le arrojó de tal modo al tomar una vara que falleció a los dos o tres días.
http://bibliotecadigital.jcyl.es/i18n/consulta/registro.cmd?id=14529