Por Rafael Comino Delgado

En plaza de las Ventas de Madrid hay un grupo de aficionados, que cuando el torero no está cruzado, casi siempre (depende del torero y del día) pitan, pero al mismo tiempo exigen que se liguen los muletazos, y así han llegado a reventar muchas faenas.

Estrictamente hablando, si se quiere ligar es imposible, o casi imposible, quedarse cruzado al terminar el muletazo para no tener que corregir la posición y ligar. Decimos casi imposible, porque puede quedare en la rectitud del toro si, tras girar la pierna de entrada (izquierda si se torea por la derecha y derecha si se torea con la izquierda) al terminar el muletazo, se desplaza lateralmente y ligeramente hacia adelante la de salida, en lugar de llevarla ligeramente hacia atrás, quedándose en el sitio, dando el medio pecho, y dejándole la muleta puesta. Desde luego, si no se queda en el sitio la ligazón será menos ligazón.

Demandan el quedarse cruzado porque creen que es lo correcto, lo más difícil y lo que más riesgo conlleva, pero los profesionales nos dicen que ello es un gran error.

Veamos lo que opinan, al respecto, muy destacados profesionales:

Manolete decía que, «colocándose al hilo del pitón, con la muleta algo retrasada, se arriesga más, porque se le da al toro la posibilidad de elegir entre el cuerpo del torero y la muleta. Hay que consentir mucho».

Para Fermín Espinosa «Armillita», “El peligro es menos al cruzarse con el toro que la forma en que lo hace Manolete”.

Rafael Ortega pensaba que, «hay toros en los que es necesario cruzarse, pero no más allá de su rectitud, para provocarles».

Para Antoñete «no hay que cruzarse entre pase y pase, ni quitarle al toro la muleta de la cara».

Paco Camino afirma que, «no hay que rectificar la posición , cruzarse , todas las veces».

Juan Posada opinaba que, «al cruzarse se descoloca al toro, y se engaña al público».

Enrique Ponce, en conferencia pronunciada el día 10 de Julio de 2017, en la Universidad Católica de Valencia, explicó que, «al hilo el pitón se arriesga más que cruzado».

Manuel Benítez «El Cordobés» es muy pragmático y afirma: «Cruzarse, no cruzase , adelantar o no la muleta son conceptos el momento, que habrá que aplicar o no dependiendo del toro». Efectivamente en algunos toros habrá que hacerlo y en otros no, pero es evidente que cuanto más se cruce el torero más descoloca al toro, y más ventaja se toma.

Nosotros pensamos que: Es conveniente cruzarse, pero no más de la rectitud el toro, en los muy bravos para ganarles la acción y en los tardos para provocarles. Lo ideal es colocarse en la rectitud del toro en el primer muletazo, y luego solo girar la pierna, quedándose en el sitio, para ligar el siguiente muletazo, en el menor espacio posible. Hay toros que embisten mejor al hilo del pitón porque les supone menos esfuerzo, y si el torero se cruza se afligen. En resumen, cruzado el torero está más protegido.