Un poco de lluvia acompañó la tarde en La Macarena… pero que más da un poco de agua, si se vivió una buena tarde de toros en la Plaza de Toros de la ciudad de la eterna primavera. La puerta grande se abrió para Morante de la Puebla y Miguel Ángel Perera.

Se lidió un encierro de Ernesto Gutiérrez, propiedad de Don Miguel Gutiérrez, con presentación desigual y un buen comportamiento en general; al decir general no quiero decir que todos fueron bravos pero si por ejemplo que sobresalieron los lidiados en segundo y cuarto lugar. El mejor de la tarde el cuarto del festejo, que le correspondió a  Diego González.

El vallecaucano Diego González es un torero de verdad, verdad; tiene clase, estética y poder en su muleta. Toreó con las dos manos, especialmente luciendo su muñeca izquierda, lamentablemente no pudo rematar bien las faenas; por fallar con la espada, pero definitivamente demostró que en Colombia hay mucho arte en la tauromaquia. El público entendió su faena pero no pidió las orejas debido a la falta de conexión con los tendidos.

José Antonio “Morante de la Puebla” casi no se encuentran palabras para describir el toreo de este andaluz, es tan puro su toreo y tan misterioso que difícilmente, se puede hallar explicación a su tauromaquia. Que gusto se dio La Macarena de poder ver en su esplendor al nacido en Puebla del Río, parecía que toreaba en cámara lenta… es más creo que los fotógrafos no tuvieron problema en capturar cada detalle, pues Morante daba más tiempo a sus tandas, a medida que había más inspiración. Es un pintor que pinta sobre el lienzo de una plaza de toros.

Hacía su única presentación en Colombia, el extremeño Miguel Ángel Perera; tras su momentánea despedida de los ruedos  por la fuerte cornada recibida en Madrid el pasado Octubre. Perera es un torero técnico y llamativo para toda la afición, ayer le cumplió a Medellín con faenas de voluntad, compromiso y efectividad. Su mejor presentación la hizo con el primer toro y paradójicamente, fue allí donde le negaron los trofeos; fue muy limpio con la muleta y lucido con le capote, en su segundo se llevó las dos orejas tras una faena en donde faltó identificar la distancia correcta del toro… claro que colofonó con una estocada en el sitio perfecto.

 

Reseña:

Con media plaza se lidiaron seis toros de Ernesto Gutiérrez. Vuelta al ruedo (2º), palmas (4º y 5º).

Diego González             Silencio y silencio

Morante de la Puebla    Dos orejas y oreja

Miguel Ángel Perera      Saludo desde el tercio y dos orejas

 

Desde Colombia, informa Carolina Baquero (Directora para América)