El Juli se encontró con el primero, un manso. No vimos nada con el capote y en las cuatro varas que recibió derribó el astado en la segunda, saliendo rebotado de todas. Tras brindar a los Príncipes de Asturias D. Felipe y Doña Sofía, el diestro inició la faena doblándose mientras el toro entraba con fuerza en la embestida, y repetía, pero la faena resultó en su mayoría fuera de cacho, con el pico de la muleta y rematando fuera. Sufrió El Juli un desarme y con el brazo suelto señaló un pinchazo yéndose, y repitió perfilado al hilo del pitón para dejar media estocada, y otra estocada trasera que despena al astado. El cuarto, de Garcigrande, entra con fuerza al caballo y El Juli realiza un buen quite. Ante la muleta el toro va con bondad, fijeza y repitiendo, aunque con la cara a media altura. Pases fuera de cacho y rematados fuera. La faena no alcanza relumbrón y entrando con el brazo suelto deja una estocada ladeada rematada con el descabello. Ovación al toro en el arrastre y pitos al diestro.
José María Manzanares con el segundo, que dobló bien de salida, entró al caballo en varas y salió blandeando de manos, se lució con el capote. El toro fue a la muleta rebrincando y la faena resultó desigual ante unos muletazos con calidad y otros dibujados. De pinchazo sin soltar y una trasera y caída dobló el toro que fue aplaudido en el arrastre, un oponente que había brindado el diestro a los Príncipes de Asturias. El quinto de Garcigrande se durmió en el peto. Toro noble, con fijeza que repite y facilita la ligazón de pases que resultaron demasiados y bastante fuera de cacho, aunque los ejecutó con temple. Aviso, estocada caída a paso de banderillas que fue definitiva. Aplausos al toro y saludos desde el tercio para el torero.
Miguel Ángel Perera tuvo en el tercero un oponente que se salía suelto en el primer tercio y que se entregó en la muleta. Brindó la faena a los Príncipes de Asturias y la buena condición del astado propició una sucesión de pases iniciada con estatuarios y continuada sobre ambas manos con muletazos templados. Entrando con el brazo suelto dejó un pinchazo sin soltar y repitió cobrando una estocada, mientras que sonaba un aviso antes de doblar el astado. El sexto se salía suelto de capote a capote fue picado trasero y se dobló en banderillas. Durante la faena, que tuvo calidad, por los momentos que se cruzó el extremeño se sumaron pases con temple. El toro con buen son de embestida, noble y repitiendo le facilitó la labor que acabó de un pinchazo sin soltar entrando con el brazo suelto, un aviso y estocada caída y tendida. Se pidió la oreja que el presidente con concedió teniendo en cuenta que el refrendo con la espada no era de tal premio. Fue ovacionado el diestro extremeño y correspondió a los aplausos.
El entusiasta público que puebla los tendidos de la monumental de Las Ventas no tiene concepto que para otorgar unaoreja en este coso debe de tener la labor el refrendo de la colocación correcta del acero.
Crónica de José Julio García
Decano de los críticos taurinos de España