Fuente: lostorosdanyquitan.com

ANTONIO ROMERO MARTÍNEZ
Solo para efectos ilustrativos
Grabado de D. Francisco de Goya y Lucientes (1746-1828)  titulado
“Muerte de José Cándido Expósito, en El Puerto de Santa María”

Matador de toros  de estirpe torera, que nació en Ronda (Málaga), el 18 de septiembre de 1763. Era el hijo menor de don Juan de Dios Romero de los Santos,  y hermano de los también matadores José, Juan, Gaspar,  y Pedro Romero. Inició su carrera como banderillero de sus hermanos hasta que se independizó a los 26 años al tomar la alternativa en Madrid el 9 de Mayo de 1789.  Toreó en Madrid junto con el afamado “Costillares”. Al poco tiempo fue herido de dos cornadas en la ingle y muslo derechos, al citar a matar, en la suerte de recibir,  a la edad de 38 años, en la Arena de Granada,  por «Ollero», un toro de la ganadería del Marqués de Tous, entre el 5 y el 10  de mayo de 1802, siendo difunto el mismo día, pues las heridas  eran incompatibles con la vida. (Crónica de d. Juan José Zaldívar Ortega)

El erudito taurino, Juan José de Bonifaz Ybarra refiere en su libro Víctimas de la Fiesta,  que << Antonio Romero Martínez, hermano menor del fabuloso Pedro, resultó corneado en la ingle y el muslo derechos al citar a matar, en la suerte de recibir, al astado “Ollero” de la ganadería del marques de Tous. El luctuoso suceso se produjo el 5 de mayo de 1802 en el coso granadino y el fallecimiento tuvo lugar en la misma fecha de la corrida. »

El martes 25 de septiembre de 2018 recibí una amable misiva electrónica de D. Pedro Julio Jiménez Villaseñor, un distinguido cronista taurino mexicano, donde me hace llegar una nota proveniente del Almanaque del Tío Jindama para 1903, donde refieren: ANTONIO ROMERO.- Nieto de Francisco y el más pequeño de los hijos de Juan, siendo, por lo tanto, hermano menor del célebre Pedro Romero. Aunque era bastante inferior á sus hermanos Pedro y José, fué lo suficientemente bueno para llamar la atención y ser uno de los espadas que más trabajaron en su época. Tomó parte como espada en las fiestas reales que se dieron en Madrid con motivo de la jura de Carlos IV, y era conocido y apreciado por los públicos de todas las plazas de España, muy especialmente las de Andalucía. El 5 de Mayo de 1802, trabajaba como matador en la plaza de Granada y al citar á recibir al toro Ollero, de la ganadería del marqués dé Tous, fué cogido, sufriendo tan terrible herida en el muslo izquierdo, que murió á consecuencia de ella, siendo su muerte sentidísima por todos los partidarios de las fiestas taurinas, que veían en Antonio Romero un digno perpetuador de las glorias taurómacas de sus antepasados.