El salmantino Domingo López Chaves, con el primero abanto de salida y poca fijeza en los capotes y que se salió suelto en la tercera vara, se dobló en el inicio del trasteo muleteril y en el repetido cite sufrió un desarme. El toro mansote buscaba y no hubo posible faena alguna ya que embestía descompuesto y no igualaba a la hora de matar. Con el brazo suelto dejó media estocada y sumó un pinchazo sin soltar una corta delantera, un descabello, aviso, y acabó de un descabello. Pitos al toro en el arrastre. El cuarto salió sin fijeza y derribó en varas. Acudió a la muleta embistiendo con la cabeza a media altura y derrotando. Desarmó al diestro y en un conjunto deslucido con un astado gazapón y probón los muletazos parecían trapazos. Atacando con el brazo suelto dejó dos pinchazos y una estocada ladeada. Pitos al toro en el arrastre.

 

Diego Urdiales tuvo un primer toro al que pegaron en varas,  embestía gazapón y que se dolió en banderillas. Tomó la muleta con  la cara alta derrotando al final del pase y rompiendo la armonía torera. Después de tanto desequilibrio el toro cambió y tomó la muleta mejor por ambos lados para adornar, después de un pinchazo sonó un aviso y el toro pasadote faena no igualaba. Otro pinchazo sin soltar, una estocada perpendicular y descabello. Pitos al toro y saludos desde el tercio para el riojano.  El quinto con más fijeza que los anteriores se dejó torear pero terminó embistiendo probón, tardeando, derrotando y apagado en la arrancada. El diestro porfió sin sacar agua del pozo. Entrando con el brazo suelto dejó un pinchazo hondo, sonó un aviso y remató con el descabello.

 

Javier Valverde tuvo en el tercero un oponente que se iba suelto aunque terminó doblando ante el capote. El salmantino se vio derribado en un quite sin consecuencias que lamentar. El toro corneó el peto y se dolió en banderillas.  Llegó a la muleta con la cara a media altura y cabeceando. Astado deslucido, toreo deslucido y el toro terminó entablerándose. Montó la espada el diestro y al hilo de las tablas con el brazo suelto dejó una estocada ladeada de la que dobló el manso que fue pitado en el arrastre. El sexto fue devuelto al corral por flojedad de remos. El sobrero del hierro sevillano de Julio de la Puerta dio muestra de toro corraleado, de salida se emplazó en la puerta de toriles y después huyó hasta de su mala sombra. Se salió suelto del caballo y se colaba al ser banderilleado. El salmantino inició la faena de rodillas en los medios, al pasarlo de muleta ya en pie comprobó que el toro se quedaba corto y blandeaba. Se quedó el morlaco y en la mitad de un pase cogió volteando al torero, que acabó con él entrando con el brazo suelto de un pinchazo y media estocada.

 

Mientras no se imponga la lidia a las series de pases absurdos sin ton ni son, iremos de mal en peor.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Crónica de José Julio García

Decano de los críticos taurinos de España